Dos años después de la convocatoria del concurso de ideas para definir lo que será la nueva plaza de Munto en Aiete, las obras han comenzado estos días y se prolongarán durante al menos tres meses.
La futura plaza de Munto, que sustituirá al solar que vacío y abandonado tendrá un presupuesto para su remodelación de 120.000 euros.
Contará con un escenario, bancos en el perímetro de la desaparecida construcción, que mirarán al sur, y un escenario de seis por siete metros. Este estrado, además de servir para acoger las distintas manifestaciones festivas y culturales al aire libre, tendrá también la doble función de esconder la bodega del viejo caserío; al que retornarán algunos de sus muebles y elementos etnológicos que la asociación de vecinos, Lantxabe, no pudo trasladar a Katxola. La Asociación facultó que estos muebles se guardaran en dependencias municipales de Ibaeta. Este mismo estrado sujetará parte del muro de Munto, que quedará integrado como vestigio histórico dentro de la nueva urbanización propuesta.
La plaza, además, quedará dividida en dos partes. Por un lado la “identitaria”, en la que estarán los restos del viejo merendero y habrá actos culturales y, por otra, una zona verde, con césped y arbolado.
Las obras van a coincidir con las fiestas del barrio, que arrancan este fin de semana y continuarán el próximo. Las primeras citas serán mañana por la tarde, con juegos populares en el Topaleku y el Festara! en las escalinatas del palacio de Aiete. El sábado se inaugurará el bolatoki Manuel Matxain y habrá concurso de marmitako, además de una comida popular. Por la tarde, la animación correrá a cargo de los payasos Gari, Montxo eta Joselontxo, que actuarán en el parque Otxanda de Munto.
Durante toda la semana habrá distintas actividades, aunque el plato fuerte llegará el próximo fin de semana, con la recogida de manzanas de Katxola para hacer sidra y una fiesta de la espuma el sábado. El domingo también habrá pintxo-pote y kantu jira con txistularis, además de animación, música y juegos.