El número de defunciones en la C.A. de Euskadi de 2014 fue de 20.157, lo que supone un incremento del 2,4% respecto a 2013, según datos de Eustat. Se produjeron 10.177 fallecimientos de hombres y 9.980 de mujeres. Por meses, enero fue el mes en el que se produjeron más muertes (2.037) y septiembre en el que menos (1.475).
Durante el año 2014 fallecieron 326 personas con 100 ó más años, entre las que las mujeres representaban el 88,3%. El número de las defunciones de personas centenarias se ha ido incrementando en los últimos años hasta alcanzar su máximo histórico en 2014.
La edad media de las personas fallecidas durante el año 2014 se situó en 79,3 años, mientras que diez años antes, en el año 2004, estaba en 76,2 años, es decir, se ha producido un aumento de 3,1 años en la última década.
Los hombres fallecieron de media a los 76,2 años y las mujeres a los 82,6 en el año 2014, mientras que en el año 2004 las medias habían sido, respectivamente, de 72,2 y 80,6 años. En consecuencia, durante estos últimos 10 años, los hombres han aumentado su vida media en 4 años y las mujeres en 2 años.
El crecimiento vegetativo fue negativo, ya que hubo 779 nacimientos menos que muertes. Por territorios, se produjeron saldos negativos en Bizkaia y Gipuzkoa, que perdieron 1.415 y 164 personas, respectivamente; por el contrario, en el caso de Álava, el número de defunciones fue inferior al de nacimientos, con lo que el saldo fue positivo en 800 personas.
En cuanto a la mortalidad infantil, fallecieron 43 menores de un año en la C.A. de Euskadi. La mortalidad neonatal, referida a los primeros 28 días de vida, contabilizó 29 defunciones; 5 de las cuales se produjeron durante las primeras 24 horas y otras 12 en la primera semana. Entre los menores de 1 año, las defunciones de niñas fueron el 53,5% del total.
El 31,6% de las defunciones ocurridas en 2014, 6.360 muertes, se debió a tumores; a continuación se situaron las enfermedades del aparato circulatorio con un 26,7% (5.388 defunciones) y, en tercer lugar, a mayor distancia, las enfermedades respiratorias, que supusieron el 9,3% (1.868). La prevalencia de estos tres grupos de enfermedades más importantes ha ido variando en la última década: mientras que las muertes por tumores y por enfermedades respiratorias han crecido un 16,1% y un 4,5%, respectivamente, las enfermedades cardiovasculares han disminuido un 6,7%.
El motivo de las defunciones continúa siendo distinto atendiendo al género, ya que entre los hombres los tumores superaron a las enfermedades del aparato circulatorio, mientras que entre las mujeres la principal causa fueron las enfermedades cardiovasculares y la segunda los tumores.
En los menores de un año, las defunciones más frecuentes fueron debidas a enfermedades originadas en el período perinatal y a malformaciones congénitas; hasta los 40 años las principales causas de fallecimiento fueron las externas, entre ellas los accidentes y los suicidios; de 40 a 80 años fueron los tumores y a partir de los 80 años las enfermedades del sistema circulatorio.