Un grupo de mujeres se percataron el pasado viernes de la presencia de una cámara móvil en uno de los vestuarios de mujeres del edificio.
El Ayuntamiento de Errenteria ha calificado este hecho de «realmente grave» y ha anunciado que, dado que el polideportivo es municipal, adoptará las medidas que estén «a su alcance» para que hechos similares «no vuelvan a ocurrir».
Además, ha señalado que el pasado lunes una mujer del municipio sufrió «una agresión sexista que fue denunciada posteriormente». Ante ello, ha trasladado su «más absoluto rechazo», al tiempo que ha indicado que se están realizando «las investigaciones oportunas para su esclarecimiento, poniendo a tal efecto los medios y esfuerzos que fueran necesarios».
El Consistorio ha trasladado una vez más su «rechazo a la violencia contra las mujeres» y ha abogado por «seguir trabajando tanto desde las instituciones y movimientos asociativos, como desde la ciudadanía, para que las mujeres puedan vivir libres de violencia machista».