Un ascensor inclinado de 143 metros entre Morlans y la rotonda de Melodi y otro vertical de menos de diez metros a la altura del puente entre Paseo Pio Baroja y Paseo de Aiete, conectarán ambos barrios.
El alcalde de Donostia ha presentado el proyecto de movilidad vertical con el que se conectará los barrios de Aiete y Morlans. Se trata de dos ascensores, que a diferencia del anterior proyecto, garantizarán la total accesibilidad a la zona y generarán menor impacto visual del previsto inicialmente.
Si bien el proyecto anterior preveía un ascensor vertical con una larga pasarela, el nuevo proyecto contempla un ascensor inclinado que arrancará en la ladera bajo el viaducto del vial del paseo Izostegi hasta la plaza de Lazkano, también conocida como rotonda de Melodi. Este ascensor inclinado recorrerá 143 metros, salvará un desnivel de 38,38 metros y tardará un minuto y doce segundos en recorrer el trayecto. La capacidad de carga del ascensor es de 1.875 kilos, por lo que podrá transportar a 25 personas en cada viaje.
El segundo ascensor, será un elevador vertical de menos de 10 metros de altura que conectará el paseo Pio Baroja con el Paseo de Aiete, junto a la parcela que albergará el futuro ambulatorio. De este modo, el barrio de Aiete quedará conectado con Morlans, así como con una gran cantidad de servicios existentes en dicha zona.
El proyecto tendrá un coste de 1,2 millones de euros y los ascensores estarán operativos en el mismo horario establecidos que para el resto de ascensores de la ciudad.
Estudios realizados por el departamento de Movilidad han revelado que la ubicación de ambos elevadores darán servicio a alrededor de 3.700 donostiarras en un área de 1,3 kilómetros.
