La directora de Tráfico ha dado a conocer también las previsiones del Departamento de Seguridad para la Semana Santa y las características de la operación especial que se pondrá en marcha el próximo miércoles.
Se calcula que habrá una media de 456.000 desplazamientos entre el 23 y el 28 de marzo por las carreteras vascas, cifra similar a la del año pasado, puesto que se prevé un incremento del 1,55% respecto al pasado año.
Doscientos agentes de la Ertzaintza velarán para que en las vías principales el tráfico sea fluido.
Los principales flujos de salida se darán los dos primeros días: el miércoles 23 por la tarde y el jueves 24 por la mañana. El retorno se producirá principalmente el lunes 28.
Según las estimaciones, que se realizan tras analizar los datos de intensidad correspondientes a la Semana Santa del año pasado, se espera que los puntos que registren mayores intensidades de circulación sean tres: la A-8, en el límite territorial con Cantabria, la AP-8 en el peaje de Biriatou y el enlace de la AP-1 con la A-1, en el nudo de Armiñón.