La Ertzaintza detenía este viernes a un hombre de 36 años acusado de un delito de falsedad documental. El sospechoso circulaba en un turismo que, como se averiguaba tras realizar las oportunas comprobaciones, había sido sustraído en Holanda el pasado mes de febrero y que presentaba diversas falsificaciones en su matrícula, el número de bastidor o su documentación.
Una patrulla del grupo ETEN de la Ertzaintza, que realizaba labores de vigilancia de tráfico por la autopista AP-8, se apercibía de que un turismo Volkswagen Tiguan de nacionalidad holandesa presentaba una anormalidad en su matrícula ya que, a pesar de tratarse de una matrícula de carácter temporal, tenía un formato que no es el habitual para este tipo de matriculaciones.
Ante este hecho, los agentes decidían interceptar el vehículo y realizar una serie de comprobaciones.
En primer lugar, tras pedir al conductor la documentación del vehículo, los agentes se percataban de que el permiso de circulación del vehículo carecía de algunos datos de obligada presencia, lo que les hacía sospechar que estaba falsificado. Igualmente, el permiso de tránsito para las placas de matrícula del vehículo presentaba evidencias claras de haber sido también falsificado.
Asimismo, los agentes comprobaban el número de bastidor del vehículo, detectando que no presentaba el formato habitual de la marca, lo que les llevaba a pensar que también había sido manipulado.
Con todo ello, los ertzainas llevaban a cabo una serie de comprobaciones que les permitían averiguar el verdadero número de bastidor del coche, lo que les llevaba a conocer a su vez la matrícula correcta del vehículo. Así, comprobaban que el vehículo en cuestión había sido robado en una ciudad holandesa en el pasado mes de febrero.
Por todo esto, los ertzainas procedían de inmediato a la detención del conductor, un varón de 36 años de edad, bajo la acusación de un delito de falsedad documental.