El radar móvil que pondrá en funcionamiento el Ayuntamiento de Donostia comenzará a medir la velocidad en distintos puntos del a ciudad el miércoles. Tal y como anunció la concejala de Movilidad y Transporte, Pilar Arana, el radar irá rotando, con el objetivo de ser un elemento disuasorio y permitir mejorar la seguridad del tráfico.
Tras estudiar las velocidades medias alcanzadas en distintas vías con gran afluencia de vehículos, y constatar que en algunas de ellas se detectaban ciertos excesos, el departamento de Movilidad decidió que el radar móvil medirá la velocidad en zonas como Riberas de Loiola, Federico García Lorca, Doctor Beguiristáin, Lugaritz, Peruene, Pio Baroja, Berio, Ategorrieta, Antzieta, Avenida de Tolosa, Oriamendi o Sanserreka-Miraconcha.
Cabe recordar que entre los datos recogidos en el estudio realizado por el Ayuntamiento, los lugares en los que se detectaron las mayores infracciones son Paseo de Lugaritz, Paseo de Berio, Paseo Doctor Beguiristáin a la altura del Oncológico y Paseo de Martutene a la altura del centro penitenciario.
En dichos lugares los conductores que infringieron el límite de velocidad oscila entre el 51,89% y el 61,12%, con velocidades media que superan los 50 kilómetros por hora permitidos – en Paseo de Lugaritz la media de velocidad alcanzada durante el estudio fue de 65,24 km/h –.
El trabajo conjunto realizado con el Centro Informático Municipal y el servicio financiero del propio Ayuntamiento, permitirá seguir el mismo proceso administrativo que con los radares fijos, de tal manera que quienes infrinjan las velocidades máximas establecidas recibirán en su domicilio la sanción correspondiente, que puede oscilar entre los 100 euros de multa en los caos menos graves y los 600 euros y la pérdida de 6 puntos del carné en los casos muy graves.