Hoy es uno de esos dos días al año que nos toca cambiar la hora de nuestros relojes.
Los ciudadanos de la Unión Europea (UE) cambiarán sus relojes este fin de semana y pasarán al horario de invierno en la noche del sábado 29 de octubre al domingo 30, como todos los últimos domingos de octubre, según lo establecido en una directiva comunitaria.
La próxima madrugada, el reloj se retrasará una hora y a las 3 volverán a ser las 2, poniendo fin al horario de verano y recuperando la hora de invierno. En las islas Canarias, el fin del horario de verano se registrará a las dos de la madrugada, que pasará a ser la una.
El cambio, por el que este domingo 30 de octubre se dormirá un hora más, obedece al cumplimiento de la Directiva Europea del Cambio de Hora, que pretende favorecer el ahorro energético.
La vuelta al horario de invierno comenzó a generalizarse, aunque de manera desigual, a partir de 1974, cuando se produjo la primera crisis del petróleo y algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz del sol y consumir así menos electricidad en iluminación. Se aplica como directiva desde 1981 y ha sido renovada sucesivamente cada cuatro años.