Poco antes de las ocho y media de ayer domingo, la Ertzaintza tenía conocimiento de que una persona había sido víctima de un navajazo y que presentaba un corte profundo en el abdomen. El hecho se había producido en el exterior de una discoteca de Eibar, de donde el agresor, al parecer, había sido expulsado acusado de causar molestias al resto de la clientela.
Según los testimonios recabados posteriormente en el lugar, cuando el individuo trataba de volver a entrar en el local habría tenido un forcejeo con los porteros, por lo que otro varón que le acompañaba habría tratado de mediar. En ese momento, el agresor habría sacado una navaja de grandes dimensiones y asestado un navajazo en el abdomen a su compañero, que resultaba herido de gravedad.
Tras retener al autor de la agresión, las personas allí presentes informaban de lo sucedido a la Ertzaintza y solicitaban una ambulancia que procedía a trasladarle a un centro hospitalario donde permanece ingresado.
Los agentes personados en el lugar, por su parte, ocupaban el arma blanca y se hacían cargo del agresor procediendo a su detención y traslado a dependencias policiales.