Una start-up alemana ha anunciado que sus empleados podrán tomar todos los días de vacaciones que deseen al año, y sin que se les apliquen descuentos a su nómina. Los 37 empleados de la firma de Ullrich Kastner podrán tomar más de los 25 días de vacaciones anuales permitidos sin sacrificar su salario, siempre y cuando logren cumplir con todo su trabajo.
El director ejecutivo, Ullrich Kastner, comenta que decidió implementar esta alternativa después de haberla probado en un selecto grupo de trabajadores. Explicó que esos empleados demostraron ser capaces de manejar muy bien la propuesta sin abusar de las libertades concedidas, de manera que ahora aplicará la iniciativa al resto
Kastner explicó: “No espero que mis empleados trabajen siguiendo determinadas reglas sino que persigan un objetivo”.
No se trata del único jefe que ha tenido la idea de pagar vacaciones ilimitadas. Richard Branson permite a sus empleados, unos 170 trabajadores, tomarse tiempo libre cuando quieran: “En teoría, solo lo harán cuando se sientan 100% seguros de que ellos y su equipo están al día en cada proyecto”, escribió en su sitio web en 2014.
Branson tomó su idea de Netflix, una compañía que introdujo su propio régimen de vacaciones ilimitadas en 2010.