Eusebio Sacristán, es el técnico que tanta falta hacía en el entorno txuri-urdin.
Tras años divagando por la mitad de la tabla con Jagoba Arrasate y David Moyes, la Real de Eusebio, es otro conjunto muy distinto, y eso se ve reflejado en la clasificacación, al igual que en la competición del KO. Los blanquiazules se encuentran en una situación idílica, en Copa siguen vivos tras eliminar al Villarreal y en La Liga Santander, perdieron el pasado encuentro la quinta posición, pero aún y todo, se mantienen en puestos europeos. Sin apenas fichajes, y tirando de gente de la casa (a excepción de algún que otro extracomunitario) han sabido sacar con creces al equipo, de los puestos mediocres de La Liga para meterlo en la lucha por Europa, teniendo como rivales directos, a clubes de gran entidad como: el Atletico de Madrid o el Sevilla FC.
La afición txuri-urdin llevaba tiempo esperando alguien que lograse jugar a un fútbol vistoso, y ambicioso; justo lo mismo que el ex del Barça, está haciendo.
El vallisoletano, reune las cualidades necesarias para ocupar el cargo de entrenador de la Real Sociedad. Eusebio cuenta con dos cualidades, cruciales en el mundo del fútbol, y sobre todo, si tienes que dirigir a un equipo como el txuri-urdin. El vallisoletano, es ambicioso, lo que hace que el conjunto sea inconformista y que cada día, cada semana, cada jornada quiera ir a más. Parece que esas ganas y ese ímpetu, también se lo ha pasado a sus jugadores, puesto que se ve como: corren más, presionan con más agresividad y saltan al terreno de juego con el balón en mente, a todos y cada uno de los duelos, y no paran hasta lograrlo.
Si por algo se caracteriza este conjunto, es por su buen juego, dominio del cuero y control del partido. El de Valladolid ha implantado el ADN blaugrana en la capital guipuzcoana, y con esa idea se está jugando a las mil maravillas, y sobre todo, se están cosechando resultados muy positivos. Debido al sistema implantado por el míster, se está jugando de perlas y eso está haciendo disfrutar a una hinchada, muy decepcionada los últimos dos años, pero que ahora por fin puede sentirse orgullosa de defender y sentir los colores blanquiazules.
