En realidad se trata de una simulación pro promovida por el Grupo educativo COAS y organizada por alumnas y alumnos de los colegios Ayalde y Munabe, que emulaba un Asamblea General de las Naciones Unidas, en el marco de la celebración de la primera conferencia Model United Nations (MUN) en Euskadi.
300 jóvenes, de once países diferentes se has reunido para llevar a cabo este simulacro de reunión en la primera conferencia MUN.
El acto principal de este congreso internacional educativo que se alargará hasta este domingo se ha celebrado este jueves en la sede parlamentaria vizcaína bajo la tutela de la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui, la directora general de la ONU en el Estado español, Tamara Zabala, la directora del Basque Know How Fundazioa, Lorea Uribarri, y la directora pedagógica de COAS, Ana Pérez Saitua.
Los escaños de las junteras y junteros vizcaínos han sido ocupados esta tarde durante dos horas por jóvenes «embajadores» de las Naciones Unidas, quienes han trabajado, debatido y redactado resoluciones sobre cuestiones incluidas en la agenda de la organización mundial.
Con el mismo esquema que se utiliza en una Asamblea General de la ONU, en Gernika han intervenido más de 50 jóvenes intentando convencer a las distintas delegaciones conformadas por alumnas y alumnos de bachiller de las bondades de sus planteamientos. Durante los próximos tres días hablarán de medio ambiente, educación, erradicación del hambre, desarrollo sostenible, salud, derechos humanos, economía o seguridad, entre otros muchos temas.
MUN nace de las siglas en inglés Model United Nations (Modelo de las Naciones Unidas). Bajo este nombre se llevan organizando desde hace más de 50 años -la idea nació en la Universidad de Harvard a mediados del siglo XX- congresos de prestigiosas instituciones educativas que están liderados por los propios estudiantes. En ellas se recrea el trabajo de la Organización de las Naciones Unidas, así como el de los órganos específicos de la ONU: Asamblea General, el Consejo de Seguridad y el Consejo de Derechos Humanos.
Gracias a MUN, las alumnas y alumnos practican técnicas de debate y controversia, mejoran su inglés, desarrollan competencias en la búsqueda y síntesis de la información, toman decisiones y trabajan en la resolución de problemas. Al mismo tiempo, se conciencian sobre los problemas que acontecen en el mundo real y crean lazos de amistad entre las diferentes delegaciones.