Los vehículos no habían sido retirados pese a que el consistorio había cerrado al tráfico los paseos Nuevo y Leizaola, y el Peine del Viento y que se había decretado alerta por impacto en la costa.
La fuerza de las olas, que han alcanzado entre 6 y 7 metros de altura, ha causado daños en 12 vehículos estacionados de los 27 que no habían sido retirados por sus propietarios. Además, el mar ha arrastrado por el paseo varias papeleras y algún banco.
Según ha informado hoy el alcalde, Eneko Goia, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, aparte de los desperfectos en esos vehículos, apenas se han registrado destrozos durante la alerta naranja decretada de madrugada, por olas que han alcanzado en la costa donostiarra los 6 y 7 metros de altura.
El acceso de vehículos y peatonas estaba restringido en los s paseos Nuevo y Leizaola, y el Peine del Viento. A pesar de ello, 27 vehículos han pasado la noche aparcados allí, 12 de ellos han sufrido desplazamientos de lugar por el fuerte oleaje y distintos daños. Dos coches han sido arrastrados por la fuerza del mar y han impactado contra la fachada de la Sociedad Fotográfica de Gipuzkoa.
Las olas han arrastrado además papeleras y bancos en varios puntos de la costa donostiarra.