La Consejera de Educación Cristina Uriarte, presentaba este martes, los datos relativos a la evolución del acoso escolar que se han registrado en Euskadi durante el curso 2015-2016.
Durante el curso 2015-2016, la Inspección de Educación contabilizó 121 casos de acoso escolar, una cifra que prácticamente duplica la recogida en el curso 2014-2015.
Es en la ESO donde se produce el mayor número de casos, aunque también es significativo el número en la etapa final de la educación primaria.
Analizando los casos por casuísticas:
La que más se repite es la agresión verbal, en el 43% de los casos.
La sigue la exclusión o marginación social, con el 25%
16% de los casos corresponden a agresiones físicas
11,6%, intimidación, chantaje o amenaza
4% otra tipología de hechos
Menos del 1% corresponde a acoso o abuso sexual, o a acoso sexista
El 23% de los casos, han tenido que ver Internet, o las redes sociales, conocido por ciberbullying.
La Consejera Uriarte ya anunció en su comparecencia parlamentaria, donde mencionó sus líneas de trabajo para la presente legislatura, que en los próximos meses el Departamento de Educación presentará un Plan contra el Acoso Escolar. Un documento en el que ya se está trabajando y que impulsará procedimientos que ayuden a desarrollar acciones contra el acoso escolar.
Teléfono Zeuk Esan
Euskadi cuenta, desde hace cerca de siete años, con un teléfono de atención a la infancia y a la adolescencia. Es el teléfono ZEUK ESAN, el 116 111. Los últimos datos indican que cada vez se está utilizando más. Es un teléfono en el que un grupo de profesionales de la psicología escucha y ayuda a los menores que lo necesitan, y que quizá, no se atreven a contar su problema directamente.
Es una herramienta más que ofrece el Gobierno Vasco. Desde el Departamento de Educación se anima a los chicos y chicas que lo necesiten, que hagan uso de él.
En opinión de la Consejera de Educación, el incremento de los casos identificados como acoso no significa que cada vez se produzcan más actos violentos o de acoso, sino que la sociedad en general, y la comunidad educativa en particular han reducido su nivel de tolerancia.
“Hemos identificado más casos, lo que no quiere decir que haya un aumento de acosos en los centros. Nosotros creemos que no. Seguramente todos… inspección, centros educativos, las propias familias y también el alumnado han variado su listón de aceptación. La acción que antes no se consideraba acoso, ahora puede ser considerada como tal. A lo que quizá hace unos años no se le daba la necesaria importancia, ahora sí se le da. Y así debe ser”.