ETA ha enviado esta medianoche un comunicado de prensa a la BBC inglesa y algunos medios vascos en el que asegura “ya es una organización desarmada”. No aporta datos sobre cómo ha llevado a cabo la entrega de las armas y explosivos que aún estaban en su poder y en todo momento, evita hablar de disolución.
«ETA, organización socialista revolucionara de liberación nacional, quiere informar a la comunidad internacional de que ya es una organización desarmada, pues a estas alturas las armas y explosivos que tenía bajo su control se encuentran en manos de la sociedad civil».
La banda señala que el desarme ha sido “un camino duro y difícil” porque España y Francia “han puesto todos los obstáculos y problemas posibles”, ya que están “empecinados en el esquema de vencedores y vencidos y enrocados en la vía policial”.
Así mismo su discurso insiste en advertir que “el proceso no está completado” pues el “día del desarme será mañana”, 8 de abril, y todavía pueden producirse “ataques de los enemigos de la paz”.
Por eso, en el mismo comunicado, la banda hace un llamamiento a la concentración este sábado en Baiona de forma directa: “La única garantía para seguir avanzando es la de los miles de personas que se reunirán mañana en la ciudad de Baiona en apoyo del desarme”.
La presencia de “sociedad civil” en el acto de mañana, supone en principio para ETA una garantía para escenificar el desarme tal y cómo la banda ha solicitado a las autoridades francesas y españolas.
Francia y España se habían negado en varias ocasiones a negociar los métodos de desarme que ETA reclamaba.
Las autoridades francesas han asegurado que en el proceso de mañana no intervendrán oficialmente. Por su parte en España, la Audiencia Nacional, con la información que Francia aportará tras la entrega de armas de ETA, abrirá una investigación.
Una de las líneas a investigar, entre otras, será calcular qué armamento van a entregar y cuánto más puede quedar sin que ETA haya podido inventariar; y aún en zulos cuya ubicación la propia banda desconoce.