Lo buscaban desde ayer, su cadáver ha sido encontrado bajo una montaña de piedras que se habían desprendido tras un alud.
El espeleólogo, de 37 años y vecino de Santurtzi había avisado ayer a unos compañeros de su intención de hacer una incursión en una cueva del barrio de San Pedro, en la localidad vizcaina de Galdames.
Pasadas unas horas y al no tener noticias de él, se organizó un grupo de búsqueda por amigos y familiares que al llegar a la cueva descubrieron que se había producido un desprendimiento.
Avisados los servicios de rescate, se procedió a su búsqueda en el interior de la cavidad. Sobre la una de la madrugada se encontraba su cuerpo sin vida bajo unas piedras.
A estas horas el cuerpo aún no ha podido rescatado y persiste la amenaza de nuevos desprendimientos por lo que las labores de rescaten están resultando difíciles.