Según un informe del Fondo de la Población de la Naciones Unidas, una de cada cuatro adolescentes de Honduras, entre los 14 y 19 años ha estado embarazada al menos una vez, mientras que siete de cada diez son víctimas de violencia de género.
Pero a partir de ayer miércoles 12 de julio de 2017, en pleno siglo XXI, serán ilegales los matrimonios con niñas y adolescentes menores de 18 años. Se deroga así el tercer párrafo del artículo 16 del Código de Familia, que hasta este momento permitía el matrimonio de niñas mayores de 16 años con la autorización de sus padres. Y se da un importante paso para generar una nueva conciencia social que evite que las niñas sean objeto de matrimonios no deseados a edades tempranas.
El parlamento de Honduras ha aprobado el decreto, promovido por la diputada Fátima Mena, del opositor Partido Anticorrupción (PAC), y por la Comisión de la Niñez, la Adolescencia, Familia y Tercera Edad, que había emitido un dictamen en contra de este tipo de uniones.
A la votación del Congreso Nacional asistió la directora de la ONG Plan Internacional Honduras, Belinda Portillo, quien agradeció al poder Legislativo aprobar el decreto que contribuirá a proteger a las adolescentes.
«Yo les agradezco señores diputados, hoy se hace historia, hoy sembraron la semilla para una nueva Honduras, una Honduras capaz, una Honduras que se desafía, una Honduras con la que soñaron nuestros próceres, una Honduras diferente, hoy ustedes legislaron por los que no votan, por los que no tienen partido político, por las que no tienen voz, por las niñas hondureñas y eso se les agradece».