Grandes inundaciones, graves destrozos materiales y 47 víctimas mortales es el rastro que ‘Harvey’ ha dejado a su paso por Estados Unidos. Las cifra de muertos continúa aumentando y las labores de rescate no cesan, aún quedan al menos 20 personas desaparecidas.
Las aguas han bajado y el huracán va perdiendo fuerza pero ya se ha convertido en uno de los peores desastres naturales de la historia del país y las imágenes que deja su paso recuerdan a la desolación que dejó el Katrina en Nueva Orleans en 2005.
El fenómeno ha dejado tras de sí graves inundaciones, una veintena de desaparecidos y más de 32.000 desplazados y se dirige ahora con unos vientos máximos sostenidos de 50 kilómetros por hora, lo que lo convierte de nuevo en una tormenta tropical que va perdiendo cada vez más fuerza.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos ha indicado que en su avance sobre Misisipi, ‘Harvey’ podría descargar de diez a veinte centímetros de lluvia. El huracán, que ha paralizado la localidad de Houston, la cuarta ciudad más poblada de Estados Unidos, podría convertirse en uno de los desastres naturales más relevantes de la historia estadounidense.
El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, viajó este jueves a la zona para supervisar las labores y observar de primera mano los trágicos efectos de Harvey. En su visita ha explicado que 311.000 víctimas de Harvey ya han solicitado ayudas y dijo que el Gobierno espera que el Congreso «trabaje rápido» para aprobar estas ayudas económicas para los ciudadanos y negocios afectados.
Trump, quien regresará a Texas el sábado, aseguró que la tormenta había sido de «proporciones épicas» y prometió respaldo federal. Se espera que el mandatario anuncie la próxima semana un paquete de asistencia federal, algo que se prevé sea aprobado sin problemas por el Congreso para financiar las labores de reconstrucción.