Un buque adaptado para la recogida de basura marina, partía este lunes de la costa de Pasaia con un cometido muy especial, limpiar de residuos la costa de Gipuzkoa.
El buque es parte del proyecto Life Lema, que tiene como objetivo “proporcionar directrices y herramientas a las autoridades locales para la gestión eficaz de la basura marina flotante”.
Liderado por el Departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral, el Ayuntamiento de Biarritz, RPT, Surfrider y AZTI, el proyecto Life Lema tiene como fin conseguir una gestión eficaz de la basura marina flotante y prever su presencia en las aguas del sudeste del Golfo de Vizcaya.
Con este fin y por primera vez, este lunes por la mañana zarpaba un buque pesquero desde el puerto de Pasaia.
A lo largo del periodo de operatividad del buque (70 jornadas en 2017 y 100 jornadas en 2018), se prevé una recogida de aproximadamente 50 toneladas de residuos diversos, además de disponer de datos reales de cuáles son los puntos de mayor acumulación de basura marina. Los datos que aporte tras sus travesías permitirán conocer la realidad de la costa guipuzcoana: dónde se sitúan las grandes acumulaciones y qué residuos las conforman.
La Agencia Europea del Medioambiente estima que cada año 10 millones de toneladas de basura marina van a parar a los mares y océanos del mundo. La basura es aproximadamente en un 80% de origen terrestre y en su composición predominan los plásticos. Una botella de plástico tarda 500 años en descomponerse y una bolsa de plástico 55 años.
El incesante aporte de residuos que se realiza al mar ha generado la formación de cinco grandes islas de basura en los océanos, y el Golfo de Bizkaia no es una excepción. La basura que flota y es visible en el mar tan solo representa el 15% de la basura marina total. Otro 15% permanece en la columna de agua y el 70% restante se encuentra en el lecho marino. Lo que se ve es solo la punta del iceberg.
El buque que navega ya en aguas de la costa guipuzcoana se dedica normalmente a la pesca de bajura y se ha adaptado para que, durante los próximos meses, compagine su actividad de pesca con la recogida de basura marina flotante.
La embarcación trabajará con una red arrastrada lateralmente por medio de un tangón. La red de aproximadamente 3 metros de longitud dispone de una boca (un marco de acero inoxidable de forma rectangular) que se mantiene a flote aproximadamente al 50% y a través del cual se irá capturando la basura marina flotante.
Para la recogida de la basura la embarcación se dirigirá hacia las líneas de corriente en donde, habitualmente, se suele acumular. Estas líneas suelen identificarse por ser de un color diferente y por la presencia de espuma superficial y aves posadas sobre el agua.
Al localizar los residuos la embarcación introducirá la red en el agua y una vez que la red está llena, ésta será izada a cubierta. Finalmente, las basuras serán trasladas a las instalaciones que AZTI dispone en el puerto de Pasajes para su caracterización y gestión final.