Un Real Madrid muy superior vence en Anoeta sin muchas dificultades a una Real Sociedad que se dejó el alma en el campo hasta el último segundo de partido. Las decisiones tomadas por Iglesias Villanueva perjudicaron en muchas veces a los de Eusebio, aunque no fueran los culpables de la derrota local. Así, llegó la primera derrota de la Real esta temporada.
Se presentaba una noche muy agitada en Anoeta. Llegaba uno de los mejores equipos de Europa, por lo que las ganas de ganarle eran aún más grandes. Desde que Iglesias Villanueva indicó el inicio del partido, los 24.966 aficionados presentes empujaron a su equipo. Avanzaban los minutos en Anoeta sin ningún equipo. dominador; ambos equipos llegaban a las áreas, pero nunca con peligro. Casi en el cuarto de hora de partido, Theo Hernández cayó en el área donostiarra después de haber intentado irse de varios defensores. Sin embargo, el colegiado no señaló nada a favor de los madridistas, por lo que los donostiarras pudieron respirar tranquilo.
Tres minutos después de la jugada de Theo, el Real Madrid contó con una ocasión muy clara. Asensio recibió un pase de Theo en la frontal a pocos metros de la portería de Rulli, y cuando el ’20’ disparó con su magistral zurda, apareció el lateral Kevin a tiempo para evitar que el Madrid anotase el primero de la noche. Justo en la siguiente jugada, la Real contó con un saque de esquina, y tras ejecutarlo y después de que el balón pasara por varios diferentes pies, Willian José no dudó dos veces y su intento de sorprender a Keylor Navas fue nula, aunque animó a la afición donostiarra.
Poco después, Mayoral anotó el primer tanto de la noche en la capital guipuzcoana. Sergio Ramos intentó controlar con el pecho un balón que recibió tras un centro, y al ser derribado pidió penalti el de Camas, pero ahí apareció Mayoral para aprovechar el balón muerto y poner el 0-1 en el marcador.
Diez minutos duró la alegría a los de Zidane. Odriozola optó centrar cuando la Real estaba cerca de la portería de Keylor Navas, y el centro, que no llegó a tener ningún rematador claro, el esférico llegó a los pies de Kevin y sin dudarlo ejecutó su volea. Y tuvo suerte. Puso el empate en el marcador después de que Keylor no pudiera atajar el balón como debía.
Y cuando parecía que la Real iba a más, el Real Madrid no permitió que se viniera más arriba. Mayoral ganó un balón aéreo con Llorente, que fue derribado cometiendo una falta muy clara, salió a la contra, y tras regatear varias veces dentro del área donostiarra, decidió realizar un pase raso para encontrar un rematador merengue, pero lo que encontró fue rematador blanquiazul: Kevin. Marcó en propia justo después de que un zurdazo parecido al gol se estrellase en el larguero de Keylor Navas. Tras el gol, el partido estuvo parado varios minutos debido a que la valla publicitaria de la portería de la Real fuera derribada y un cámara sufriera algo importante para que los servicios médicos le retirasen del estadio.
Cuando los dos equipos tomaron el camino a los vestuarios, Iglesias Villanueva y los jugadores del Real Madrid recibieron una enorme pitada por el arbitraje y juego mostrado respectivamente durante la primera parte.
Comenzaba el segundo tiempo y el Real Madrid seguía mostrando su poderío, aunque no de una forma tan superior como en el primer tiempo. Mayoral tuvo una de las ocasiones más claras del partido con un disparo cerca de la línea de fondo y cerca de la portería de Rulli. El delantero escogió la opción de chutar y su disparo fue directo al lateral de la red, cuando gran parte del estadio veía que entraba.
A la hora del partido se veía como un jugador blanco estaba corriendo de una forma magistral la banda derecha del campo. Ése era Bale. Recibió un pase desde el centro del campo, corrió hacia la portería de Rulli con el balón en los pies, superando en creces a Kevin en carrera, y batió al meta argentino con una mini-vaselina, enmudeciendo Anoeta. Con este gol, Bale lograba anotar el sexto en cinco partidos jugados en Donostia; está claro que es un estadio de su gusto.
Marco Asensio quiso sumarse a la fiesta goleadora en la capital donostiarra en el minuto 83 de partido, pero la estrella del Madrid se encontraba se encontraba en posición antirreglamentaria e Iglesias Villanueva anuló el gol, recibiendo severas protestas por parte de Gareth Bale.
Pocos minutos después, Zurutuza llegaba a la frontal de la portería de Keylor, y a la hora de chutar a puerta, defensores blancos derribaron al ‘17‘, cometiendo un posible penalti. Sin embargo, el colegiado no detuvo el juego, dejando claro que no era pena máxima para los donostiarras.
Con el 1-3 en el marcador, concluyó el partido entre vascos y madrileños en Anoeta. El Real Madrid cortó la muy positiva racha de la Real Sociedad, mientras que suman tres puntos importantes en su lucha por el título liguero. La Real, en cambio, es tercera con un total de nueve puntos.