Este lunes la búsqueda de Juan Álvarez se llevará a cabo únicamente por los efectivos desplegados al efecto. La previsión de fuertes rachas de viento ha propiciado que se desaconseje la participación de los numerosos voluntarios que durante la jornada del domingo se unieron a las tareas de localización.
Juan, de 56 años y vecino de Arrasate, salía de su casa el pasado jueves hacia el monte para hacer su ruta habitual en bicicleta. No regresó y desde entonces se desconoce su paradero.
Alrededor de 250 personas; efectivos de la Ertzain-tza, Cruz Roja, DYA, Bomberos y Protección Civil, guardas de las diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa, unidades caninas de Burgos y Elorrio y decenas de voluntarios peinaban en monte de Anboto y otras zonas aledañas a Arrasate como Kobate-Besaide, Tellamendi o Zabalandi.
Hasta ahora, el único rastro que se ha hallado de Juan ha sido su bicicleta. Ha aparecido en las cercanías del caserio Parraia, entre Arrasate y Aramaio.
Desde primera hora de la mañana, hasta que la llegada de la noche hizo imposible continuar, decenas de personas y los perros de la Unidad Canina de la Ertzaintza examinaron todos los lugares posibles donde se pudiera hallar algún rastro del arrasatearra. También hizo una exploración exhaustiva el helicóptero de la Policía vasca, pero finalmente no se logró dar con el paradero de Álvarez. Por eso, sobre las 19.30 horas se desactivó el operativo.
Este lunes se está celebrando de las 10, una reunión entre responsables del operativo con la alcaldesa de la localidad para adoptar las decisiones oportunas sobre la búsqueda que, en principio, se va a mantener hasta hallar a Álvarez.
También está previsto que agentes de la Unidad de Montaña de la Ertzaintza con perros suban hasta una zona de tres simas en Tellamendi que son de difícil acceso.