Los 70.000 funcionarios públicos recibirán en la nómina de noviembre la última parte de la paga extra de 2012 que fue cancelada por el Gobierno de Madrid. El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha informado de que esta decisión aprobada por el ejecutivo, supondrá un desembolso de alrededor de 50 millones de euros.
Los funcionarios que en este momento no se encuentren en activo pero sí lo estaban en el momento de la retirada de la extra la cobrarán de oficio sin necesidad de reclamarlo.
Completar la paga extra congelada a los 70.000 funcionarios vascos era una medida que el Gobierno contemplaba realizar antes de que finalizara el año, pero el anuncio esta semana de que se ingresará en las nóminas de noviembre, permite allanar el camino para la reunión de la Mesa General de la Función Pública que tendrá lugar este jueves.
Erkoreka ha recordado las propuestas que el Gobierno vasco ha colocado sobre la mesa, entre ellas, Ofertas de Empleo Público (OPE) en todos los sectores con 13.000 plazas, retomar las aportaciones a EPSV con 17 millones de euros y una subida del 1,5% lo que «supondrá 63 millones de euros para las arcas públicas», según ha detallado el consejero.
Así, a partir de 2018 los trabajadores públicos vascos podrán retomar la normalidad en el abono de las pagas extraordinarias, que se volverán a liquidar en los meses de junio y diciembre.