El testimonio de la víctima puede estar siendo crucial en la investigación que la Ertzaintza ha abierto para esclarecer el extraño caso.
La joven de 24 años, vecina de Irun y trabajadora social del centro Aspace de la misma localidad, permanece ingresada en el Hospital de Donostia tras ser encontrada este martes en un talud cercano al parque de Mendibil, maniatada y amordazada.
Aunque cuando los servicios de emergencia la rescataron había perdido la consciencia y sufría una grave hipotermia, ha recuperado ya la consciencia y su estado mejora. Su testimonio puede ser clave para esclarecer el extraño hecho.
La joven que vivía muy cerca del lugar donde fue encontrada, fue arrojada previsiblemente en la madrugada del lunes al martes desde una altura de 10 metros al fondo de un talud donde la vegetación era muy espesa.
Estaba atada de pies y manos con bridas y amordazada con cinta americana. Según ha trascendido de las primeras declaraciones de testigos presenciales, no presentaba golpes o desgarros en la ropa que indicaran que previamente había sido agredida.
Fue encontrada por un ciclista que circulaba por las inmediaciones del parque irunés y rescatada por los servicios de emergencia. Aunque en un principio se encontraba consciente, cuando el equipo sanitario la atendió de primera instancia había perdido la consciencia. Desde entonces permanece ingresada en el mismo centro hospitalario.
La Ertzaintza mantiene abierto el caso mientras la víctima presenta una evolución médica favorable.