Donostia ensayará el modelo de cooperativa para el alquiler público de vivienda. El Gobierno Vasco ha anunciado que comprará suelo en Txomin Enea para poner en marcha esta experiencia piloto y comprobar si esta fórmula permite el acceso a la vivienda a personas que no pueden optar al mercado libre.
Según ha explicado el consejero de Vivienda, Iñaki Arriola, la cooperativa para el alquiler es una «medida novedosa» incluida en el proyecto y que ya se han llevado a la práctica en países como Dinamarca -«con una incidencia interesante en el mercado inmobiliario», según ha precisado- y en ciudades como Madrid y Barcelona.
En este modelo, las personas que conforman la cooperativa hacen una aportación inicial para la construcción del edificio y, una vez instalados, pagan una renta mensual. Si en un momento determinado, algún vecino quiere dejar la vivienda, se le reembolsa dicha aportación inicial y se permite entrar a un nuevo cooperativista.
Esta vivienda se puede dejar en herencia, pero no se puede vender directamente a otra persona, ya que tiene que intermediar la cooperativa como entidad jurídica dueña de la promoción.
Se mantiene así el funcionamiento de este sistema, al que podrán acceder las personas que cumplan los requisitos que se establezcan en su momento.
Iñaki Arriola ha explicado que los ejes del citado Plan son la política de alquiler y la apuesta por la rehabilitación de la vivienda y la regeneración urbana. También presta una «atención especial» a la juventud como uno de los sectores «más necesitados».