La UTE Haizea, formada por INBISA Construcción, Gaimaz e Intxausti, ha cumplido el principal hito en la ejecución de la nueva planta de cerca de 48.000 metros cuadrados que se está construyendo para Haizea Wind Group en el muelle AZ-2 del Puerto de Bilbao. Los edificios se dedicarán a la fabricación de torres eólicas off-shore, así como al almacenamiento exterior del producto terminado. Se trata de tres grandes naves adosadas en paralelo, todas ellas de 20 metros de altura libre, coronadas por vigas delta de hormigón prefabricado. Una de las naves tiene 250 metros de longitud y las otras dos alcanzan los 500 metros. En la obra se han montado 256 pilares prefabricados de hasta 22 metros de altura y 133 vigas de hasta 36 metros de longitud.
Gonzalo López, director de área de Obra Civil de INBISA Construcción, destaca: “Para nuestra empresa es todo un orgullo llevar a cabo junto a nuestros socios de UTE una obra tan emblemática, tanto por su ubicación, volumen y dificultad técnica como por la importancia que representa para la economía de Bizkaia, para un cliente como la Autoridad Portuaria de Bilbao y un usuario final de la relevancia de Haizea Wind. Es, además, especialmente importante para nosotros que la actividad se dedique a las energías renovables, un campo en el que INBISA Construcción está cada vez más implicado”.
Respecto a la finalización de la estructura, Gonzalo López remarca: “El cumplimiento en plazo de este hito contractual, que alcanzamos con dos semanas de antelación, es un paso clave para culminar con éxito una obra que precisa de un alto grado de coordinación y capacidad técnica”.
El plazo total de ejecución de esta obra, con un presupuesto de más de 17 millones de euros, es de 7 meses y medio y está prevista su finalización el próximo mes de febrero. Dentro de la misma actuación se está desarrollando un edificio de oficinas de 610 metros cuadrados y, adicionalmente, se está urbanizando una superficie de más de 22.000 metros cuadrados.
La finalización de la estructura tiene lugar en el ecuador del plazo de la obra, junto con la finalización de la fachada del edificio de oficinas y la ejecución del 50% de la superficie de cubierta, como principales hitos de seguimiento contractuales requeridos por la APB. Por parte de las empresas constructoras se ha realizado un control y coordinación periódica de la ejecución de la estructura prefabricada a efectos de comprobar los elementos, la previsión de planificación y realizar el seguimiento del cumplimiento de los plazos contratados.
En cuanto a las cimentaciones, es interesante destacar que para su ejecución ha sido preciso coordinar dos empresas de mano de obra, dos empresas suministradoras de ferralla y tres plantas de suministro de hormigón. Contando también con tres equipos de topografía empleados para el cálculo y replanteo de los elementos que conforman dicha cimentación, empleando útiles de replanteo fabricados expresamente para la colocación de los anclajes de los pilares con tolerancias milimétricas. En dicha fase se han conseguido unos rendimientos superiores a 600 metros cúbicos de hormigonado diarios.
El proceso productivo que va a tener lugar en las nuevas instalaciones incluye el procesado de las chapas provenientes de las acerías, la fabricación de torres tubulares troncocónicas metálicas y el tratamiento superficial o acabado de las piezas.