La llamada «banda del mordisco» está conformada por menores de edad de origen rumano que están controlados por mafias asentadas en la Cañada Real, El Gallinero y Getafe.
Así le consta a la Policía Nacional, que ya ha detenido en varias ocasiones a miembros de estos grupos. Primero, entre noviembre y diciembre de 2016, cuando se hicieron (que se sepa) con 24 teléfonos móviles de últimos modelos por el método del mordisco: rompen con los dientes los anclajes a las mesas expositoras, que además funcionan como alarmas, aunque quedan desactivadas.
Luego, los autores materiales les pasan los terminales a otros chavales de la banda, mientras que otra parte del grupo se dedica a distraer a los dependientes y vigilantes de seguridad del establecimiento. No utilizan tenazas, tijeras, navajas ni ninguna otra herramienta. Solo sus bocas.
El pasado febrero, fue detenido un clan, encabezado por Daniela P. y Laura M., de 19 y 27 años. Contra ellas se decretaron órdenes de alejamiento sobre la tienda de Apple y un delito continuado de hurto. Utilizaban a menores de entre 14 y 16 años. En aquella ocasión se hicieron con 24 IPhones, valorados en más de 23.000 euros.
Este puente es cuando han identificado a dos menores, de 13 y 16 años, aunque el primero no pudo permanecer detenido al ser inimputable. Con su compañera, se hizo, en tres días, con 11.000 euros en terminales IPhone 8 y IPhone X, los más caros y modernos del mercado.