La Ertzaintza ha desmantelado, en colaboración con los Mossos D’Equadra y la Guardia Civil, una organización «criminal» formada al menos por once personas a la que se le atribuye un fraude de 17 millones de euros a la Agencia Tributaria y otros 23 a la Hacienda de Gipuzkoa.
Este grupo tenía su base de operaciones en Irun y llevaba dos años ejerciendo como intermediario en la venta al por mayor de carburantes, operaciones de las que no tributaba el IVA.
Este fraude permitía a la organización ofrecer a las estaciones de servicio precios inferiores a los de mercado, «lo que provocaba un grave perjuicio a los competidores que sí cumplían sus obligaciones fiscales», según ha explicado el El Departamento de Seguridad.
La investigación culminó la semana pasada con una operación policial que permitió localizar a 11 personas sospechosas de formar parte del grupo. Dos de ellas fueron detenidas en Irun, tres en Vielha (Lleida), tres en Madrid, una en Ciudad Real y otra en Córdoba. Una última persona fue localizada en Madrid, donde se le informó de su situación de investigada.
Tras pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Donostia-San Sebastián, el principal implicado ingresó en prisión y el resto quedó en libertad con medidas cautelares. Los once tienen la obligación de depositar una fianza solidaria de 40 millones de euros.