Ermua mostró ayer su rechazo y condena a la agresión sexual sufrida por una mujer en el municipio, realizando una concentración que se desarrolló en silencio durante 15 minutos en la Plaza Cardenal Orbe tras una pancarta con la inscripción «No a la violencia contra las mujeres».
La agresión sexual ocurrió presuntamente el pasado lunes, cuando la mujer se dirigía a su casa y un hombre la abordó por la espalda, la empujó y realizó tocamientos, pero la víctima pidió ayuda a gritos, lo que hizo que el hombre se diera a la fuga.
La concentración contó con la presencia de vecinos y representantes municipales. Al término del acto fue leída una declaración aprobada por la Junta de Portavoces en la que el Ayuntamiento expresaba su «condena y rechazo a todo tipo de abusos o agresiones sufridas por mujeres, ya que suponen una grave lesión contra su salud, dignidad y libertad».
De esta forma manifestaban su «apoyo y solidaridad» con la mujer agredida, así como con su familia y entorno más cercano, y ponen a su disposición los servicios de atención y apoyo psicológico y jurídico, así como «todo el tipo de ayuda que pueda necesitar».