El año pasado se registraron 35.256 accidentes de trabajo con baja, lo que supone un aumento del 5,7% respecto a 2016. Los accidentes laborales con resultado de muerte se elevaron a 32, 8 menos que el ejercicio precedente, según datos de Osalan.
El sector con mayor siniestralidad laboral fue la Construcción (86,2 bajas por cada mil ocupados), seguido de Primario (75,5 bajas por cada mil ocupados), Industria (65,3 bajas) y Servicios (27,4 bajas por cada mil trabajadores).
Los accidentes en jornada ascendieron a 29.629 (+5,5%) y los contabilizados ‘in itinere’ a 3.935 (+12%). Del total de accidentes en jornada de trabajo, 29.443 fueron leves (+5,5%), 161 graves (+16,7%) y 25 mortales (nueve menos que en 2016). Los siniestros ‘in itinere’ de carácter leve fueron 3.890 (+11,8%), los graves fueron 38 (+40,7%) y los mortales siete, uno más que en 2016.
Por otra parte, Euskadi contabilizó el pasado año 1.445 enfermedades profesionales nuevas que causaron baja laboral, lo que supone un ascenso del 25,% con respecto a las contabilizadas en 2016. Los casos de enfermedades profesionales que no provocaron baja se elevaron a 1.656, lo que supone un 3,7% más que las 1.597 enfermedades sin ausencia laboral contabilizadas en 2016.
