Medio centenar de personas, convocadas por los sindicatos ELA, LAB y CCOO, llevaron a cabo ayer una concentración delante del nuevo supermercado de la estación de autobuses de Donostia para demandar que no abra los domingos y festivos.
Con una pancarta con el lema «Igande eta jai egunetan itxita» y carteles con el lema «Nuestro ocio no es negocio», los asistentes corearon gritos en contra del establecimiento.
La portavoz de ELA Maddi Aspiazu declaró que trabajar en estos días «va en contra de los intereses de los ciudadanos y va a favor de los intereses de unos pocos».
