Un hombre acusado de abusar presuntamente de una de sus dos hijas menores de edad a la que habría sometido a diversos tocamientos se enfrenta a una petición de cinco años y diez meses de prisión por parte de la Fiscalía y de la acusación particular. Asimismo, exigen la adopción de medidas que impidan al procesado aproximarse a las víctimas y comunicarse con ellas, mientras que la defensa solicita la libre absolución de su patrocinado.
Los hechos enjuiciados habrían tenido lugar en Donostia en septiembre de 2015, cuando la más pequeña de las dos niñas habría revelado a su abuela materna los presuntos tocamientos a los que le habría sometido su padre en algunos períodos en los que las hermanas pasaban con su progenitor tras el divorcio de sus padres.
El acusado negó categóricamente haber abusado “nunca jamás” de su hija o haber tenido ningún comportamiento “indebido” con sus hijas y lamentó, entre lágrimas, que desde que ocurrieron los hechos no ha podido ver ni comunicarse con ellas.
El procesado también recordó que el divorcio estuvo motivado por una infidelidad suya y que en una ocasión su exsuegra le dijo que le iba a “hacer el máximo daño posible por el daño que le había hecho a ella y a su familia, y que se encargaría también de decirles a las niñas cómo se había comportado su padre”.
El juicio continúa hoy con la declaración de nuevos testigos.