Una mujer de 40 años fue arrestada el pasado jueves en Irun acusada de derribar con su vehículo a un motorista de la Ertzaintza, que la había interceptado por hablar con el teléfono móvil mientras conducía, según ha informado el Departamento vasco de Seguridad.
Los hechos se produjeron en la la carretera GI-636, a su paso por Irun, cuando dos agentes en sendas motocicletas vieron cómo la conductora estaba haciendo uso del móvil mientras circulaba, por lo que le ordenaron que parara en un lugar seguro. Allí se le sancionó y, al tratarse de un vehículo de matrícula extranjera y de una persona de nacionalidad no española, se le comunicó que debía pagar la sanción en el momento para evitar que el coche fuera inmovilizado.
La mujer mostró una actitud agresiva hacia el agente y tras arrebatarle la documentación de las manos, se introdujo en el turismo, dio marcha atrás bruscamente y derribó al ertzaina, tras lo cual se dio a la fuga a gran velocidad.
La mujer finalmente fue detenida por un presunto delito de atentado contra agentes de la autoridad y el agente al que embistió fue atendido por molestias en una mano.