Un hombre ha sido condenado a pagar una multa de 2.700 euros por abusar sexualmente de la mujer que cuidaba de su madre en el caserío familiar situado en una pequeña localidad de Gipuzkoa, donde la sometió a distintos tocamientos.
El procesado se mostró conforme con la pena que solicitó para él la Fiscalía, por lo que ahora ha sido condenado como responsable de un delito de abusos sexuales con la atenuante de haber actuado bajo los efectos de bebidas alcohólicas o estupefacientes.
Los hechos sucedieron sobre las 05:30 horas del 9 de septiembre de 2016, cuando el encausado acudió a pernoctar al citado caserío, en una de cuyas habitaciones dormía su madre, quien estaba atendida por su cuidadora. “A sabiendas de que la perjudicada se encontraba en su interior” y, “con ánimo libidinoso”, el acusado la abrazó fuertemente, mientras la mujer le expresaba “su rechazo”. El procesado persistió en su conducta” y le pidió que se fueran “juntos a la cama” para dormir con él, al tiempo que la sometía a distintos tocamientos y la empujaba hacia la cama “de forma violenta”.
En ese momento, la afectada “comenzó a gritar pidiendo auxilio al hermano del acusado que dormía en otras de las habitaciones del caserío”, por lo que el procesado “abandonó el lugar precipitadamente».