La DFG destinará en 2018 un total de 206.218.356 euros -16 millones más que el año pasado- para mantener y reforzar la red de servicios sociales en cuatro campos de acción clave del Departamento de Políticas Sociales, que suman un total de 8.410 plazas conveniadas –con 245 plazas nuevas- en 302 centros. Así lo dio a conocer ayer por la mañana el diputado general, Markel Olano, en el marco de la visita que ha realizado junto a la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, a la residencia para personas mayores Aita-Etxe, en el barrio donostiarra de Ategorrieta. Se trata de los convenios y contratos prorrogados de los servicios sociales dentro del presupuesto 2018, que ha aprobado el Consejo de Gobierno Foral, y que según ha indicado Olano se implementarán en estas cuatro áreas: “Prestación de servicios a personas mayores dependientes; prestación de los servicios destinados a personas con discapacidad; atención de menores en situación de desamparo en pisos y otros centros especializados; así como convenios de colaboración formalizados con diversas entidades que operan en el ámbito de la inserción social y el empleo de personas en riesgo de exclusión, así como en el de las víctimas de violencia machista”.
En lo que respecta al desglose de los convenios y contratos prorrogados, la diputada Maite Peña ha explicado que en primer lugar se destinarán 115.563.935 € para la prestación de diversos servicios a personas mayores dependientes (6.122 plazas), con objeto de dar servicio en residencias (4.565 plazas. de las cuales 545 son en unidades psicogeriátricas en 66 centros) y en centros de día (1557 plazas en 63 centros).
En segundo lugar, un total de 43.563.935 € serán para la prestación de personas con discapacidad (1.576 plazas conveniadas), más concretamente para la prestación de los servicios de residencia (863 plazas en 62 centros), y centros de día (713 plazas en 32 centros). En tercer lugar, se otorgarán 28.472.535 € para la atención de menores en situación de desamparo en pisos y en otros centros especializados, con 317 plazas en 33 centros de 9 entidades.
Y en cuarto lugar, Peña ha avanzado que se destinarán 18.617.951 € para los convenios de colaboración formalizados con diversas entidades que operan en el ámbito de la inserción social y el empleo de personas en riesgo de exclusión, y en el de las víctimas de violencia machista. En total serán 645 plazas en 59 centros de 9 entidades.
En ese sentido, ha explicado que tanto para el servicio residencial como para el centro de día, la estimación del gasto se ha realizado en base a la “previsión de utilización” de plazas conforme a las tarifas aprobadas para cada convenio por la gestión de las “diversas alternativas” convivenciales que realizan las instituciones colaboradoras.
Asimismo, la diputada ha subrayado que otra de las medidas que va a tomar la Diputación será “diseñar y establecer” un sistema de evaluación “de la calidad” en centros y servicios sociales. “Como objetivo último, buscamos un sistema de evaluación de la calidad que sea sostenible (financiera y operativamente) y que permita interrelacionar los datos de calidad provenientes de los centros – vía inspección− con los resultados de las encuestas realizadas a las personas usuarias”. “En este sentido se va a proponer un cuestionario de satisfacción uniforme para todos los centros asistenciales para personas mayores, diferenciando en su caso, entre los diversos tipos de atención (residencial o diurna) y las diversas modalidades de plazas (psicogeriátricas, etc.)”, ha indicado Peña, al tiempo que ha avanzado que ya se está trabajando “en el diseño de este sistema que prevemos implantar experimentalmente a lo largo de este año”.
Aita-Etxe: 17 plazas conveniadas
La residencia Aita Etxe, que lleva 15 años en funcionamiento, es una villa romántica con el encanto de principios del siglo XX. Ubicada junto al reloj de Ategorrieta, esta residencia pequeña y familiar tiene capacidad para 27 personas (con 17 plazas conveniadas y 10 privadas), con una media de edad de 88 años. “Nuestra política se basa en una atención centrada en cada persona, personalizando la atención a cada residente. Trabajamos con las personas, pero también con la familia desde el momento del ingreso, fomentando la participación de las familias e implicándolas en el cuidado del residente”, ha explicado en el transcurso de la visita la directora de Aita-Etxe, Belén Gutiérrez, añadiendo que todo eso es posible gracias a “un equipo estable, formado e implicado”. “Y en cuanto a la casa, tratamos que no recuerde a un hospital, todas las habitaciones son distintas. El salón da acceso a un jardín de 600 m2, y este a su vez tiene acceso sin barreras a una zona peatonal silenciosa y muy bien comunicada”.
Para finalizar, el diputado general ha destacado que la renovación de estos convenios refleja la “decidida apuesta” de la Diputación por la “sostenibilidad” y el “fortalecimiento” de las políticas sociales. Al respecto ha señalado que el ente foral está “afrontando” los tres grandes retos que tiene el territorio en presente y futuro: “El primero es atender a las situaciones que derivan del envejecimiento de la población; el segundo es proteger a las personas que por diversas razones estén o puedan estar en riesgo de exclusión social, para lo cual contamos con el Plan de Inclusión Social Elkar-EKIN, del que este año se beneficiaran en torno a 4.000 personas. Y nuestro tercer reto como Diputación es garantizar la sostenibilidad del sistema”. “En definitiva, la Diputación apuesta por un modelo centrado en la persona y su entorno cercano, como es el caso de la residencia Aita-Etxe que hoy visitamos”, ha subrayado Olano, añadiendo que “apostamos por ese modelo guipuzcoano” a través de un compromiso político “al más alto nivel”, en el que se reconoce que las personas son “los actores principales” y “el factor clave” para el desarrollo de la sociedad guipuzcoana.