El Plan de Vivienda de Donostia contempla 1.808 viviendas de promoción privada en zonas como Sarrueta, Antzita, Esnabide o Ciudad Jardín, entre otras, 1.660 de promoción municipal en forma de apartamentos dotacionales en lugares como Amara Zaharra, Manteo, Altza o Parte Vieja, y otras 1.080 viviendas en Morlans, Altza, Riberas de Loiola y Txomin Enea.
El gobierno municipal entiende que estos desarrollos están llamados a atender la demanda de la ciudadanía en materia de vivienda, sin que ello suponga la solución definitiva a un tema que lleva décadas como una de las principales preocupaciones dada la carestía del suelo y de la vivienda libre en la ciudad.
El Plan establece una serie de objetivos estratégicos para hacer frente a las necesidades actuales de la ciudadanía. Uno de ellos es priorizar la ciudad ya construida con medidas como la mejora de la accesibilidad para colectivos especialmente sensibles al tema de la movilidad, como el caso de los mayores, o facilitar incluso con ayudas públicas a la rehabilitación una división de las viviendas que permita la puesta en el mercado de una mayor oferta.