El Grupo Irizar inauguró el pasado viernes por la tarde en Aduna la denominada Irizar e-mobility, la primera planta de electromovilidad europea.
La planta, que ha supuesto una inversión de 75 millones de euros, cuenta con una superficie construida de 18.000 metros cuadrados, sobre una parcela de casi 4 hectáreas, se dedicará a la fabricación, no sólo de autobuses eléctricos, sino también de otro tipo de vehículos industriales que complementen las necesidades de electromovilidad de las ciudades.
En la nueva planta, que tiene una capacidad productiva inicial de mil vehículos año, se fabricarán los vehículos y sus principales componentes y sistemas, según ha informado hoy la firma guipuzcoana en un comunicado.