El colectivo ciudadano Erretxinduak celebró ayer, en la plaza del Ensanche de Irun, un homenaje a Nagore Laffage Casasola por el décimo aniversario de su asesinato durante las fiestas de San Fermín de 2008.
En la cita tomaron parte cientos de vecinos, amigos y familiares de la joven, entre los que se encontraba su madre, que recibió un aplauso de los presentes.
Tras guardarse un minuto de silencio y bailarse un aurresku en su honor, amigas de Nagore leyeron un comunicado en el que valoraron el trabajo de la familia para «para que haya justicia y siempre se te recuerde y para nunca dejemos de gritar que no es no».
Asimismo, Erretxinduak ha impulsado una recogida de firmas para solicitar al Ayuntamiento que ponga el nombre de Nagore a un parque infantil que se está construyendo en la localidad.