Las lesiones musculares y articulares son las lesiones más comunes en los deportes físicamente activos. Suelen ser bastante recurrentes y pueden derivar con frecuencia en la imposibilidad de realizar entrenamientos o participar en competiciones.
Si bien algunas de ellas aparecen de manera accidental y súbita, lo cierto es que la mayoría dan señales de sobrecarga, molestias etc., avisando con tiempo de que algo “falla”.
La prevención en las causas y/o el tratamiento recuperador y preventivo pueden conseguir eliminar, minimizar o mantener la zona afectada en condiciones hábiles y funcionales evitando que vayan a peor.
Uno de los tratamientos más simples y efectivos es el de la crioterapia, aplicación de hielo o frio en lesiones agudas, inflamaciones, dolor y edemas. Si a la aplicación de frío se le añade compresión se aumenta la efectividad frente a los edemas.
Dependiendo del tipo de deporte o disciplina, las lesiones tienden a ser focalizadas mayormente en una zona. Pongamos por ejemplo el fútbol, los dolores de rodilla o tobillo son muy frecuentes debido a la alta exigencia que se le exige a sendas articulaciones.
La aplicación de crioterapia post-entrenamientos ayuda a que dichas articulaciones se mantengan en óptimo estado de mantenimiento, sesión tras sesión, evitando el dolor e inflamación habitual.
Los siguientes artículos de crioterapia pueden ayudar al deportista a mantenerse sano y funcionalmente apto en casos de dolor, sobrecarga, contusiones, esguinces, etc. Fabricados con tejido de lana y sintético, en su interior contienen un gel que mantiene la temperatura (frío/calor) hasta 3h:
- Tobillera térmica : la envoltura está diseñada para adaptarse correctamente al tobillo fijándose con velcros.
- Rodillera térmica alivia los síntomas de dolor muscular y articular envolviendo la rodilla de forma ligera.
- Faja Lumbar para aplicar en caso de sobrecargas, lumbalgias, contracturas.
- Collarín Térmico para molestias en zona de cuello.