El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha declarado que el acercamiento de los presos de ETA a Euskadi comenzará por los internos enfermos y por los mayores de 70 años.
No obstante, Sánchez ha dejado claro que el cambio de prisión de los reclusos depende de Instituciones Penitenciarias y requiere de «mucho trabajo técnico».
Ya en su intervención en el pleno, el jefe del Ejecutivo español había pedido el «apoyo» del Congreso para cambiar la política penitenciaria en el País Vasco y acercar al País Vasco a los presos de ETA, lo que hará «siendo empáticos con las víctimas del terrorismo».