Un grupo de turistas británicos que se encontraba en Benidorm celebrando una despedida de soltero ha pagado 100 euros a un vagabundo para que se tatuara en la frente el nombre del novio.
El hecho ha causado gran malestar en la ciudadanía y el colectivo británico de la localidad alicantina ha iniciado una campaña de crowdfunding para eliminar ese tatuaje y ayudar al hombre con sus problemas de movilidad.