El alcalde de Donostia, Eneko Goia, realizó ayer unas declaraciones en las que destacó el «buen ambiente» y la alta participación en las actividades de la Aste Nagusia, pero también quiso alertar sobre el aumento de hurtos en la ciudad y envió un mensaje de «solidaridad» a la familia del urnietarra que se encuentra hospitalizado tras ser agredido durante estas fiestas.
Goia ha valorado que las fiestas están transcurriendo «con muy buen ambiente, con muy buena participación de público y con normalidad». En este sentido, ha explicado que la alta participación se está registrando también en los barrios, donde la gente «está respondiendo», como en el caso del «Festara» descentralizado que se ha llevado a cabo este año por primera vez.
El primer edil ha citado también las «sombras» de las fiestas, entre las que ha destacado las tres agresiones sexuales, un problema ante el que «no hay que bajar la guardia».
También ha destacado que en los partes de sucesos que recibe cada mañana ha constatado un incremento del número de hurtos, sobre todo de teléfonos móviles, por lo que ha solicitado a los ciudadanos que mantengan «alta la guardia» y vigilen sus pertenencias, sobre todo en las grandes aglomeraciones.
Del mismo modo, ha mencionado el «triste suceso» ocurrido en la madrugada del día 12, cuando un vecino de Urnieta fue víctima de una agresión que le causó heridas graves y le mantienen en estado de coma en el Hospital Donostia. Goia ha transmitido un mensaje de «solidaridad» a la familia de la víctima y el deseo de que «pueda recuperarse» de sus graves heridas.