Un hombre ha aceptado hoy una condena de dos años de cárcel y 63 días de trabajos en favor de la comunidad por abusar sexualmente de su exmujer y como responsable de un delito de maltrato no habitual y una falta de vejaciones injustas, según ha informado la agencia EFE citando fuentes del caso.
En la vista por estos hechos, celebrada esta mañana en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa, el procesado ha reconocido los sucedido y ha admitido la pena propuesta por la Fiscalía, que ha incluido en su escrito de acusación la agravante de parentesco pero también las atenuantes de intoxicación etílica y de reparación del daño causado, esta última muy cualificada, después de que el hombre haya indemnizado ya a su víctima con 8.500 euros.
Durante el juicio, el tribunal ha suspendido la pena de cárcel al imputado con la condición de que no vuelva a delinquir en los dos próximos años, y de que siga un tratamiento de deshabituación del alcohol y un curso de educación sexual.
Asimismo el hombre deberá permanecer bajo una medida de libertad vigilada durante cinco años, y tendrá que respetar las penas accesorias que le impiden comunicarse con la afectada y aproximarse a ella durante diez años.
Los hechos enjuiciados sucedieron en mayo de 2015 en una localidad del interior de Gipuzkoa, cuando una noche, después de concluir la relación sentimental que ambos mantenían, el hombre regresó al domicilio familiar tras haber estado consumiendo bebidas alcohólicas, acudió al dormitorio y se introdujo en la cama junto a la víctima.
Seguidamente, el inculpado, que a lo largo de su matrimonio solía insultar a la mujer con diferentes expresiones vejatorias e incluso en una ocasión llegó a agarrarla fuertemente del cuello, mantuvo relaciones sexuales sin el consentimiento de ella.