El sindicato ErNe ha solicitado más agentes para la comisaría de Irun, alegando que no dan a basto debido a la llegada masiva de migrantes, muchos de ellos devueltos «en caliente» por la gendarmería francesa al intentar pasar la frontera.
El representante de ERNE ha declarado que «cualquier actuación vinculada con este problema migratorio, por la casuística que posee en cuento a cantidad de personas implicadas, puede terminar requiriendo la presencia de muchos agentes, cosa que la precariedad del personal hace que sea imposible de realizar».