La nueva iluminación nocturna del edificio histórico del Museo San Telmo realzará a partir de mañana el valor de la arquitectura del edificio al mismo tiempo que aportará luz a la plaza Zuloaga.
El proyecto ha estado dirigido por Pablo Barone, arquitecto de reconocido prestigio especializado en iluminación de patrimonio artístico, y ejectutado por Loyola Norte, empresa adjudicataria del concurso.
La propuesta de Barone respeta la conservación del bien cultural, y propone un diseño que permite jugar con la luz de un modo equilibrado realzando la arquitectura y evitando excesos de luces y sombras.
La característica estética mas reseñable es que se trata de una iluminación ordenada y uniforme. Se ha elegido como escena principal, cotidiana, una iluminación con una temperatura de color de 3000K, cálida y regulada en consonancia con el color de la piedra arenisca. Sólo excepcionalmente y con motivo de algún evento especial se podrá cambiar el color de la fachada.