El Juzgado de Instrucción número 1 de San Sebastián acusa al tatuador donostiarra en prisión provisional de la comisión de diversos delitos de carácter sexual, vejaciones y contra la intimidad.
El auto considera que los hechos relatados por trece de las quince denunciantes podrían ser constitutivos de distintos delitos de agresión sexual, abusos sexuales, vejaciones, acoso, acoso sexual y contra la intimidad, si bien no concreta su número.
La defensa del procesado ha presentado ya un recurso de reforma y subsidiariamente de apelación al entender que en el auto faltan elementos para «poder determinar» los delitos imputados y que existe una «falta de fijación de los posibles tipos» delictivos.