La arqueobotánica tolosarra Amaia Arranz ha recibido la beca europea de investigación e innovación Marie Sklodowska-Curie para continuar investigando el descubrimiento de los restos carbonizados de un pan cocido por cazadores-recolectores hace unos 14.400 años.
Según este descubrimiento, grupos de cazadores y recolectores del noreste de Jordania elaboraron los primeros panes de la humanidad, 4.000 años antes de que la invención de la agricultura y la explotación de los animales domésticos, en el Neolítico, hicieran posible el cultivo de los cereales con fines alimenticios.
El descubrimiento de un grupo de investigadores, liderados por la arqueobotánica vasca Amaia Arranz Otaegui, de la Universidad de Copenhague, ha sido publicado por la prestigiosa revista científica estadounidense Proceedings of the National Academic Science (PNAS).
Arranz ha mostrado su felicidad a través de Twitter después de conocer que le han otorgado una beca de dos años para continuar con la investigación. «Dos años de apasionantes investigaciones en el horizonte», ha asegurado en la red social.