La Fiscalía de Gipuzkoa solicita nueve meses de prisión para el fotógrafo Kote Cabezudo por intentar borrar, presuntamente, imágenes de un servidor informático antes de que la Ertzaintza pudiera acceder a él.
Cabezudo se encuentra en prisión provisional desde hace más de un año, mientras tiene lugar la instrucción de este caso, en el que está siendo investigado por presuntos abusos a modelos, estafa, agresión sexual y elaboración de pornografía infantil, entre otros delitos.
Los hechos se remontan al 30 de julio de 2014, cuando la Ertzaintza registró el domicilio del fotógrafo con la intención de «incautar los soportes informáticos» de posibles imágenes y vídeos pornográficos relacionados con el caso.
No obstante, a pesar del registro realizado por la Policía en su vivienda, el procesado presuntamente «tenía más material fotográfico y videográfico» de sus supuestas víctimas en dos páginas web alojadas en un servidor de internet que gestionaba su informático.
Con el fin de acceder a este material, el 29 de enero de 2017 la Ertzaintza solicitó la correspondiente autorización judicial «para realizar un análisis forense remoto» del servidor en el que se alojaban las páginas.
De esta manera, «conocedor de los tiempos de reacción más lentos de un juzgado», el fotógrafo solicitó los «usuarios y claves de acceso a la información que pudiera haber guardada en el servidor» con la presunta intención de «borrarla», entorpeciendo así la labor judicial.
La Fiscalía considera que estos hechos son constitutivos de un delito de estafa procesal en grado de tentativa por el que reclama para el encausado una pena de nueve meses de prisión. Esta asunto se encuentra pendiente de resolución, mientras continúa la instrucción de la causa principal.