La Asociación Zubieta Lantzen ha comenzado a recoger muestras científicas, junto a ToxicoWatch y una empresa acreditada por el Gobierno Vasco, con el fin de comprobar posibles emisiones tóxinas de la incineradora.
La Asociación ha recordado que la Diputación «está obligada por Ley a hacer un plan de seguimiento de las emisiones, para poder asegurar que los humos que salen de la chimenea no tienen afecciones en la calidad del aire, en el suelo, en las aguas, en los productos agrícolas locales, en la vegetación, ni en las personas».
A ello ha añadido que la investigación «independiente» que va a llevar a cabo será «comparable y complementaria con los resultados que en un futuro Biodonostia pueda publicar».