El denominado Eguzki, Euskal Herriko Talde Ekologista eta Antiklearra, ha denunciado que los vertidos contaminantes siguen siendo algo cotidiano en Ondarroa., localidad vizcaína vecina de Gipuzkoa.
La pasada semaku.na, los miembros del colectivo tuvieron conocimiento de dos. «El primero, de aguas negras, en Kakaleku. Por lo visto, la depuradora ha vuelto a tener algún fallo. El segundo, de gasoil, en el propio puerto. En el puerto hay un montón de cámaras, pero nunca se da con los responsables de los vertidos. La impunidad es total», relatan en un comunicado.
