Donostia y Zarautz son dos de las siete localidades vascas seleccionadas como banco de pruebas, junto a Bakio, Bermeo, Bilbao, Gernika y Vitoria.
Este proyecto, cuyo objetivo es ver si estos proyectos funcionan antes de aplicarlos al resto de zonas y municipios, cuenta con la financiación europea ‘Life Urban Klima 2050’. Además, Euskadi va a invertir 20 millones de euros en los próximos 5 años en proyectos de adaptación al cambio climático.